INTENCION

Al salir de casa tan temprano, ya se dio cuenta que algo no iba bien, no había dormido nada, se había pasado la noche fumando mientras navegaba por Internet con rumbo a ninguna parte. Eran las seis de la mañana, se enfundo tejanos y camiseta gastada, no se peino, ni se lavo los dientes, tenia en la boca un sabor a tabaco negro que le provocaba un acentuado mal gusto, antes de salir, se guardo el cuchillo grande del desordenado cajón de los cubiertos en el lado derecho de la cadera, debajo de los pantalones y la camiseta, no se veía y apenas le molestaba al andar.
No sabía para donde ir, ni lo que quería hacer. Anduvo sin rumbo fijo una o dos horas, observo que había pasado más de dos veces por un mismo sitio, pero no le importo. Al rato empezó a ver actividad en las calles, luces en las ventanas, y vehículos circulando, se irrito todavía mas, odiaba profundamente el automatismo de las personas, parecía que no hubiera nadie en el mundo que no siguiera las putas reglas marcadas por la decrépita sociedad de mierda.
Empezó a subir una leve cuesta, y vio como un coche salía de un parking, paraba en medio de la acera, abría la puerta, y bajaba un hombre enfundado en traje de Armani, con dos bolsas de basura para tirar al contenedor, ni siquiera se molesto en parar el motor. “Este pijo va a ser el primero” se dijo. Se levanto la camiseta, apretó el mango del cuchillo con todas sus fuerzas, aligero el paso acercándose a su víctima, podía sentir el cuchillo rompiendo primero la americana, y luego la carne, y como la sangre tibia resbalando por la afilada hoja se abrazaba a su mano, y goteaba espesa en la acera, a sus pies. Bordeo el coche por la parte de atrás, y estando a menos de tres metros de su primera víctima, se monto en el coche, cerro la puerta y desapareció, sin ni siquiera fijarse en el.

PREOCUPATE DE TI

No se por que pasa, pero el caso es que me siento rodeado por ellas, por esas personas que no miran su propio bien estar, si no el de los demás, pero no por fines humanitarios, no, mas bien al contrario.
Me explicare mejor:
Yo creo que lo que prima es que cada uno de nosotros este bien individualmente, (para no liarla, me centro en situación laboral), independientemente de que los demás estén mejor que uno mismo, ¿eso seria lo lógico, no?, ¡pues no!, por muy bien que estén, siempre se quejan de que los otros están mejor, ¡Que giliopollez!, si tu estas bien, no te empieces a mirar si otro esta mejor, si quieres, intenta estar como esos otros, pero de entrada piensa en que si estas bien como estas, no te preocupes de si hay alguien que esta mejor que tu, ¡claro que los hay!, y mas de los que nos pensamos, ¡no te jode!
¿por que lo complican?, ¿se complican?, ¿me complican?....
Bah, lo dicho ¡una gilipollez!

MAMMA MIA

Yo no se escribir bien, tampoco se expresarme como quisiera, y tampoco entiendo de cine.

Para mi toda película que me entretiene, me distrae, me emociona, me hace llorar, o me hace pensar, es una buena película. Cine independiente, comercial, de culto, ¡yo que se!, me da igual, si me lo paso bien, para mi es buena. Acabo de ver por segunda vez Mamma Mia, y por segunda vez he sentido todo lo que he explicado antes, no se que criticas a tenido, ni quien es el director, conozco a penas tres o cuatro actores de los que salen, pero me es indiferente, me encanta, me gusta mucho, y la quería recomendar en el blog por si alguien no la ha visto.

Solo eso.

EJECUTIVOS

Por desquiciante que sea a veces, se debería de controlar, al menos por parte del adulto.
Hoy he presenciado una escena que me ha provocado pena y rabia a la vez.
Resulta que una “mamá ejecutiva”, aparca delante de mi oficina cada día a la misma hora, baja toda peripuesta ella, con sus cuatro hijos, calculo así por encima y por orden ascendente nueve meses, tres años, siete años y diez años (este ultimo lo se seguro). Bueno, pues lo que digo, se baja del coche, “descarga” a los niños, y una persona mayor, seguramente el abuelo, o la abuela, según el día, esta esperando en la acera, los recoge, y se van juntos al piso de los “abuelos”.

La “mama”, va alteradísima todos los días que yo la he visto, tiene los nervios a flor de piel, si algún día al llegar, el abuelo o abuela, no están esperando, se pone a tocar el claxon, como una desesperada, apenas cruza una palabra tanto con los niños, como con los abuelos, pero si que es cierto que al marchar (nunca tarda en realizar toda la operación mas de tres minutos) besa a los cuatro hijos.
Esto es normal, estamos tan obcecados en nuestro trabajo, y vivimos tan al limite del tiempo, que esto es una situación normal. Lo que me ha indignado hoy, ha sido que la “mama” le ha soltado un sermón cargado de ira, rabia y lagrimas a la niña de diez años, la cual ha aguantado estoicamente la embestida, sin hacer un solo gesto, no ha llorado, no ha replicado, ni siquiera cuando le ha dicho eso que da tanta rabia de: ¡Ya esta bien, ¿eh? Que tienes diez años!, ni con esas, aguantando con temple. Al llegar la despedida besucona, la “mama” ha realizado la ronda, omitiendo besar a la niña de diez años, cuando ella ha subido al coche, la pequeña se ha puesto a llorar como una desconsolada, mientras el abuelo, le pasaba el brazo por los hombros, y miraba al interior del vehiculo para ver si la “mama” reaccionaba al respecto, pero ella ya estaba mirando su Black Berry.

AMISTAD

.-¿Qué podemos hacer?
.-Nada, ¿Qué quieres hacer?
.-No se, ¿dímelo tu?
.-Nada, no vamos a hacer nada.
.-¿Pero entonces?
.-Entonces, ¿Qué?
.-Bueno, ¿no se?, algo puede cambiar?
.-Si, algo puede cambiar.
.-¿Qué podemos hacer?
.-Nada, no vamos a hacer nada.
.-Bien, ¿otro café?
.-¡Venga!

Atardecía, el otoño se había precipitado sobre la ciudad, fundiéndose en un abrazo de viento y hojas secas, que giraba alrededor de los dos. Había comenzado a nevar, tenuemente y los blancos copos caían sobre el gorro de lana de ella, que dejaba entrever unos mechones de pelo desfilados y lacios como lana virgen, tenia esa media sonrisa que a el tanto le gusta, mientras el bromeaba con su cantoneo de caderas provocado por unos altos tacones fundidos hacia la caña de las botas que ceñían su pantalón tejano ajustado y gastado que moldeaba sus torneadas piernas. En el callejón se mezclaban los cristales helados de la nieve, con las luces de Navidad que pendían de las ornamentadas rejas de los balcones, creando una disparidad de colores agradable a la vista, y en la lejanía, la estrechez de la calle cobijaba a dos chiquillas cubiertas con guantes, abrigos, e ilusiones de desempolvar el trineo del abuelo. A medio camino, el portal de la casa, anhelando su calidez interior ella se resistía a entrar, y cambiar el paseo por cuatro paredes. Despedida fría y solemne, en el interior una espalda solitaria pegada al cristal de la puerta, en el exterior una inmóvil figura vacía mirando el horizonte, sin llegar a verlo, cuando la nieve hace de manta a una solitaria lagrima resbaladiza.

BONNIE & CLYDE

¿Sabéis por que en parte tenéis miedo? Es muy fácil, no queréis prescindir de vuestra libertad individual, si, si, aunque suene mal y egoísta, es así. Y cuanto mas tiempo pase, peor, o mejor, según se mire, claro. Dicen que la soledad es el precio de la libertad, y eso condiciona, no debería, pero lo hace, el problema es querer precipitarse, intentando cubrir huecos que parecen vacíos. La reflexión debería de ser si realmente están vacíos, incluso le podríamos dar la vuelta a la cosa esta de la libertad, y decir algo, como:
“Dispongo de una libertad consentida, y una soledad compartida”. Con el tiempo los amigos de verdad, esos que ahora parecen inaccesibles por sus obligaciones naturales, estarán mas libres de ataduras, para poder con ellos compartir esa soledad de la que hablamos, y disfrutar de la libertad mutua. ¿No?
En fin….
¡Buena suerte!

DANTES EL VELERO

.-¿Qué pasa Dantes?, ¿Qué te preocupa tanto?
.- Tengo dudas, tengo la opción de navegar por el Atlántico, pero me da miedo.
.- ¿Por qué te da miedo?
.- Pues no se, no lo conozco, es bravo, imprevisible, grandioso, virgen, no se.
.- Lo que te pasa capullo, es que estas muy bien acostumbrado al Mediterráneo, con su calma, su estabilidad, tu conocimiento sobre el….Sabes lo que es, y te gusta pensar que será así toda la vida. Pero puede que no, no te fíes nunca de un Mar, por tranquilo que te parezca, al final siempre viene un temporal, o dos o tres, o tienes una maldita mala racha y te rompes el mástil, intentando esquivar olas de catorce metros. ¿Qué te crees que tu amado Mediterráneo, no te agujereara la bañera cuando le apetezca? No te equivoques con lo que crees que conoces, Dantes.
Navega por el Atlántico, explóralo, disfrútalo, deja que te zarandee a su aire, y lucha por sobrevivir en el, y con el. Contrólalo, siente como te fundes en sus aguas sabiendo de antemano que no te vas a quedar en ellas, por mucho que te atraigan. Altérnalo con tu querido Mediterráneo de calidas aguas, pero no te quedes con las ganas de ampliar tus conocimientos, y ganar experiencia en otros mares y océanos, no lo hagas. Quien sabe, quizás encuentres lo que buscas, o quizás no, ¿ves a saber Dantes?